Centros de responsabilidad como centros de costes

De Descuadrando

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Los centros de costes

En las organizaciones económicas públicas y privadas, se entiende que un centro de responsabilidad ee un coste cuando refleja una unidad organizativa que agrupa y tiene responsabilidad sobre una o varias actividades claramente identificadas en el ciclo de explotación. En el proceso de captación, cálculo y acumulación de costes sirve como nudo de distribución de los costes indirectos y actúan de punto de enlace entre los elementos de coste primarios y los portadores finales.
Son centros resultantes de la división del organigrama y también son conocidos como “secciones homogéneas”, porque representar divisiones reales del organigrama donde se realiza un trabajo homogéneo sobre el que se ejerce un control de responsabilidad. Agrupan factores que se consumen para desarrollar una actividad concreta (homogénea) que es el objetivo de dicho centro.

Como medir su rendimiento

Su output se mide en variables que representan a prestaciones o unidades intermedias que se obtienen en el centro y que son distintas al producto/servicio finalista. Estas variables con frecuencia son conocidas como unidades de obra y su finalidad es ayudar a controlar el rendimiento y la productividad, ayudando a conseguir minimizar el coste de la actividad que desarrolla y/o maximizar lo que produce el centro con el nivel de costes fijos adscritos y la capacidad que éstos le permitan.

Características de los centros de coste:

a) Son centros de imputación y control de costes. b) Recogen costes indirectos al producto final (aunque también pueden recoger costes directos). c) Recogen costes homogéneos, es decir, que se pueden representar mediante una unidad de medida común denominada “unidad de obra”.

Clasificación de los centros de costes

En principio se pueden hacer tantos centros de costes como parezca oportuno pues dependerá de las características propias de cada proceso productivo si bien, es habitual que se parta de las funciones que separadamente se puedan identificar en el organigrama. Se debe intentar dividir a la unidad económica en un número de suficiente de centros como para que recojan costes homogéneos y en cada uno se pueda realizar los fines de control de gestión. Una vez diseñado el mapa de centros de costes en que se dividido la organización puede tener una valor añadido agruparlos a efectos de control. En este caso los centros se pueden clasificar en función de su relación directa con el portador finalista objeto de venta, es decir con el generador de ingresos, dando lugar a las siguientes categorías:

Centros Principales: aquellos cuya actividad está directamente relacionada con el producto final objeto de venta, trasladan sus costes a estos productos. Su actividad puede medirse por el propio producto o por unidades de obra representativas del trabajo realizado.

Centros de Apoyo: Su actividad es de apoyo a otros centros, no trabajan directamente en el producto final objeto de venta. Trasladan sus costes a los centros a los que prestan servicio. Su actividad habrá que medirla a través de una variable representativa del trabajo que efectúa.

Centros Mixtos: por las características de las actividades que realizan se pueden tratar como centros principales y/o auxiliares.

Centros Especiales: tienen características muy específicas y tienen carácter extraordinario

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