Visión de la empresa

De Descuadrando

La visión refleja la imagen mental de la trayectoria de la empresa en su funcionamiento, hace referencia a la percepción actual de lo que será o debería ser la empresa en el futuro, y establece los criterios que la organización ha de utilizar para fijar el camino a seguir. Su definición debe ser uno de los papeles centrales del líder. La visión debe ser una referencia para todas las actuaciones de los individuos de forma que, ante las diversas alternativas que se les pudieran plantear sobre como realizar las tareas, todos los integrantes optarían por aquellas que más se le ajusten. Identificará las diferencias entre la situación actual y la deseada, y marcará la dirección a seguir por la empresa. Una visión bien diseñada prepara la empresa para el futuro y debe dar respuesta a las preguntas de ¿cómo seremos, cómo deberíamos ser, qué queremos ser en el futuro?

Características de la declaración de la visión

  • Debe ser positiva, atractiva, alentadora e inspiradora.
  • Debe estar alineada y ser coherente con la cultura de la organización.
  • Debe ser clara y comprensible para todos.
  • Debe ser ambiciosa, pero no imposible de alcanzar.
  • Debe ser realista, considerando el entorno y los recursos de la organización.

Aunque la visión recoge la situación deseada que puede tener la empresa en el futuro, no debe ser una ilusión o una fantasía. La identificación de la visión necesita de la creatividad, el instinto y el sentido intuitivo de la alta dirección, pero no debe ser el resultado de una iluminación o representación idílica en la que se recojan supuestos muy alejados de una realidad posible.

Debe ser una interpretación realista de como será la empresa en aquel momento. Ello implica una consideración adecuada tanto de las condiciones de mercado, tecnológicas, económicas y sociales a las cuales habrá que enfrentarse en el futuro, como de los recursos y capacidades disponibles o a los que debería acceder. Con ello se conseguiría preparar la organización para afrontar las distintas amenazas y oportunidades externas que se le presenten, así como saber manejar adecuadamente las potencialidades o debilidades internas que la empresa posea.

La definición de la visión no se debe plantear en términos de beneficio o de creación de valor para los accionistas. Son condiciones necesarias y generales para todas las empresas que aseguran su propia supervivencia a largo plazo. La mayor parte de las empresas de éxito están marcadas por el sentido de un propósito que va más allá del deseo de riqueza. Su diseño dependerá del tipo de empresa de que se trate y de la ambición con la que cada una quiera formularlo. Así, una gran empresa podrá intentar ser el líder nacional o mundial en su industria, otra más pequeña optará por dominar un nicho de mercado u otra cualquiera querrá ganar al principal competidor. Cada una de estas formulaciones puede ser adecuada en función de las características específicas de cada empresa. Su definición en unas pocas palabras o una frase precisa suele ser más efectiva que en un documento extenso. Su consecución está fuera del alcance de las empresas, de forma inmediata. Se puede plantear con un horizonte definido (a largo plazo) o indefinido. Cada empresa estimará el que considere más oportuno, aunque se suele recomendar que no sea inferior a una década como período mínimo sobre el que poder establecer el marco de referencia deseable.

Ventajas de establecer una visión

  • Incentivar el entusiasmo y el compromiso de todas las partes que integran la entidad.
  • Fomentar a que desde el director general hasta el último trabajador de la empresa, realicen acciones conforme a lo que indica la visión. Recordando que los mandos superiores tienen que predicar con el ejemplo.
  • Una adecuada visión, evita que se le hagan modificaciones, de lo contrario cualquier cambio esencial dejaría a los componentes de la empresa sin una guía fiable, fomentando la inseguridad general.


Bibliografía

  • BUENO CAMPOS, E.; Cruz Y.; Duran J.J. (1987): “Economía de la Empresa. Análisis de las decisiones empresariales”. Madrid: Ed. Pirámide. S.A
  • NAVAS LÓPEZ, J.E.; Guerras Martín L.A. (1996):“ La Dirección Estratégica de la Empresa”. Teoría y Aplicaciones. Madrid: Ed. Civitas, S.A.
  • BUENO CAMPOS, E. (1996):“ Dirección Estratégica de la Empresa Metodología”, Técnicas y Casos. Madrid: Ed. Pirámide.
  • SÁNCHEZ VIZCAÍNO (2011),“Administración de Empresas”, Madrid: Ed. Pirámide.
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